jueves, 14 de enero de 2010

¿REALMENTE DESEAS A DIOS?

ERES MI DIOS NO UN SIMPLE ACCESORIO




Yo soy el Alfa y la Omega, principio y fin», dice el Señor, el que es y que era y que ha de venir, el Todopoderoso. Apocalipsis 1.8

Eres mi Dios y no hay nada ni nadie más fuera de ti y que a ti se compare en este mundo porque todo lo que vemos y aún imaginamos lo creaste. ¿Podrá la creación ser mayor que su creador? No hay nada ni nadie como Tú. Te amo. Eres mi mayor tesoro aunque en mis miembros todavía haya una lucha con el pecado, ya Tu Hijo Jesucristo ha vencido la muerte en la Cruz del Calvario y me ha dado vida y vida en abundancia. No hay condenación para los que estamos en Cristo Jesús y ahora podemos vivir para ti porque nos compraste. Ya no me pertenezco aunque realmente nunca lo he sido. Soy tuyo Señor, sigue haciendo tu obra en mi vida y moldeando mi carácter de acuerdo a tu Santo Evangelio y el fruto que tu Espíritu va formando dentro de mí.

En el tiempo donde nos has permitido vivir, los hombres dicen tener a su “dios” como un simple accesorio en sus vidas que pueden manejar y manipular como a ellos les place. Nada diferente a los dioses de los antiguos. Creen indiferentes que Tú puedes ser simplemente una pieza en su rompecabezas de vida y que pueden sacarte y ponerte cuando se les antoje. Te quieren como una pantalla, una camisa, un collar para llevarlo puesto donde quiera que van, como algo que lleven como prenda, un amuleto pero que no se inmiscuya en sus vidas sino que les de “buena suerte”. Olvidan que en ti no existe la casualidad y que se hace en el mundo como Tú, en tu Soberana Voluntad deseas. Piensan en su “dios” como algo más que es parte de su entretenimiento personal o de su comportamiento cultural, realizan conciertos de adoracion rockero,merengueros y salsero con luces apagadas y un juego de luces estilo discoteca mundanal y piensan esa mentira que Tù estàs ahì aún así creen el engaño que estarán contigo en el paraíso solamente por decirte Señor.

»No todo el que me dice: “Señor, Señor” , entrará en el reino de los cielos, sino sólo el que hace la voluntad de mi Padre que está en el cielo. Muchos me dirán en aquel día: “Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre expulsamos demonios e hicimos muchos milagros?” Entonces les diré claramente: “Jamás los conocí. ¡Aléjense de mí, hacedores de maldad!” Mateo 7.21-23

Señor mío, el consumismo y la falsa comodidad del individualismo nos consume. Nos destroza al punto de la ociosidad y el deseo de tener más y más sin ser nunca saciados. Sálvanos de esta espuria, falsa y utópica ignorancia. Que cuando veamos a los más necesitados nuestros corazones realmente se quebranten porque a veces creemos simplemente que es otra película de ficción que vemos en el cine. Nuestras neveras rebosan de comida que a veces ni usamos. Nuestros cuartos rebosan de ropa que ni usamos y deseamos más. Parecemos niños que no se sacian con un solo juguete, quieren más y más. ¿Hasta cuándo viviremos ignorantes y participaremos de esta falsa utopía donde ya tu dejaste de ser el centro? Eso creen ellos, Tú eres el centro aunque ellos lo ignoren. En tu gracia común les permites respirar y vivir, caminar y ver tu creación.

¡Qué equivocados están al pensar que te pueden tener encajonado y tener control de Ti cuando la realidad es que Tu nos tienes encajonados a nosotros y haces con nosotros como te place dentro del mundo que creaste!

¿Hasta cuándo serán ignorantes a tu Santidad y Grandeza? Quieras en Tu Misericordia infinita que no sea hasta el día del juicio porque ya será demasiado tarde para ellos. Permíteme hablarle a mi generación del amor de Jesús. Quiero ser tu atalaya en la torre que mira la pobreza espiritual de tu pueblo, que ve la crisis desde arriba de la torre que anuncia las buenas nuevas de la Gloriosa Segunda Venida de tu Hijo Jesucristo para aquellos escogidos los cuales abrirás sus ojos para ver, y podrán gozarse en tu Gracia y tu Verdad. Tú no estás amarrado al tiempo en que vivimos, tu creaste el tiempo y espacio aunque te haces presente en medio de él. Que en este nuevo año que nos permites en Tu Voluntad abrir nuevamente, podamos llevar con diligencia la Luz de tu Evangelio en la más densa oscuridad. Aún cuando nuestra realidad se derrumbe, dános la valentía de los hombres y mujeres de ayer que estuvieron estar dispuestos a poner sus vidas en la brecha por Ti y para tu Gloria y Honra.

Eres mi Dios, mi Rey, mi Todo, no un simple accesorio. En todo caso yo soy tu esclavo y haces conmigo como quieres. Hazme siempre ver las cuerdas de amor que me atan a ti. Las cuerdas que me dan libertad y me dan seguridad. Esas cuerdas que me llevan a tu voluntad y que no me dejan perderme. Esas cuerdas que me hacen libre y hacen ver a los demás realmente encadenados. Soy libre de las cadenas de pecado, ahora soy esclavo de tus cuerdas de amor. Pido que siempre me hagas ver esas cuerdas y no dejes que yo haga mi voluntad.

En el nombre poderoso y realmente maravilloso de Jesucristo,

Amén, Amén y Amén

No hay comentarios:

Publicar un comentario